lunes, 26 de septiembre de 2011

EL PARAMO DE JUAN RULFO


Novela: “Pedro Páramo”
Autor: Juan Rulfo

Temas. La muerte, la violencia, la opresión, la desesperanza, la soledad y el olvido.

Argumento.

 Juan Preciado, hijo de Pedro Páramo (Pedro = piedra. Páramo = lugar frío y deshabitado), viaja de su pueblo natal, Sayula, hasta Comala (“lugar sobre las brasas”), un pueblo solo, fantasma, silencioso, lleno de ecos, abandonado, caluroso, por donde deambulan los muertos, con el fin de buscar a su padre, ya que le había prometido a su madre, al momento de morir, que lo haría, pues debía “cobrarle caro” el abandono en que lo tuvo a él y a su madre Dolores Preciado. En Comala se aloja en la casa de Eduviges Dyada, una muerta, y ésta le cuenta algo sobre la vida de Pedro Páramo, de quienes lo rodeaban y de la cotidianidad de Comala. Damiana Cisneros, otra muerta, que había trabajado en la hacienda Medina Luna, de Pedro Páramo, al servicio de éste y le conseguía mujeres para su disfrute, le cuenta más sobre la vida de Comala y de Pedro Páramo. Mientras dialoga con Damiana, ésta desaparece. Luego se aloja en la casa de dos hermanos que mantienen una relación incestuosa. Finalmente, Juan Preciado muere en la plaza de Comala, a consecuencia de los murmullos y los ruidos, y es encontrado muerto por Dorotea, otra muerta, que en vida era la encargada de conseguirle las mujeres para Miguel Páramo (hijo de Pedro Páramo), y los dos siguen conversando, ya que están enterrados en la misma tumba. Entre voces de muertos que andan por las calles de Comala y sus sueños, Juan se entera de la vida de su padre. Como en una especie de segunda parte del libro (que no está delimitada en la novela), el autor relata la vida de Pedro Páramo, con sus conquistas y su maldad, mostrando otros aspectos como la muerte de Miguel Páramo, los conflictos mentales del padre Rentería, las maldades de Fulgor Sedano (capataz de Pedro Páramo), los sufrimientos de Susana San Juan (el eterno amor de Pedro Páramo) y la lucha revolucionaria. Pedro Páramo era dueño de vidas, cosas y animales. Era un cacique latifundista. Su gran fortuna, que comprendía toda Comala, la obtuvo a través de la violencia, el asesinato, la corrupción, el sometimiento, el engaño y la maldad. Tuvo muchas mujeres e hijos. La que más quiso, Susana, murió loca; los habitantes de Comala se burlaron ante la tristeza de esta desgracia; y por eso, Pedro Páramo, dueño Comala, dejó morir a todos sus habitantes. Pedro Páramo se entregó a la amargura, y muere después que fuera atacado por Abundio Martínez, uno de sus tantos hijos naturales.


Comentario.

Lo que más llama la atención de tan compleja novela no es su estructura profunda o subyacente, sino su estructura superficial, elaborada en un lenguaje exquisito, con ricas metáforas, con frases sublimes. El autor utiliza un lenguaje enternecedor, musical, agradable, a pesar de los modismos y los términos cotidianos. La obra está narrada en tercera persona y por varios personajes, entre quienes sobresale, en las primeras páginas, Juan Preciado. Hay saltos en el antes y en el después. Es una “historia” atemporal y sin espacio. Es una forma muy particular de narrar. Tal vez en esto y en su agradable lenguaje radica la belleza de tan excelente novela. Es una obra en la que hay que unir retazos, armar un rompecabezas, para tratar de comprenderla. Su argumento no es tan atrapador, como su lenguaje. No son muchos los mensajes que implica la obra. Se evidencia algo sobre la soledad, el olvido, el sinsentido, la opresión, la religiosidad  y la marginación del pueblo latinoamericano. Comala simboliza el continente latinoamericano: pobre, sin identidad, poblado de personas que caminan como robots, marginado, desesperanzado, atrasado, muerto...


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